Corrimiento de tierras de CATASCO: se refuerza la vigilancia
octubre 2025
La Comunidad Alpina de los Valles del Lario y del Ceresio ha encargado al CAE la instalación de un nuevo sistema de vigilancia en el corrimiento de Catasco, en el municipio de Garzeno (CO), de conformidad con la Resolución XII/2635 del Consejo Regional "Plan Regional para la ejecución de obras de mantenimiento de cursos de agua, corrección de laderas inestables e implantación de sistemas de vigilancia en el territorio de las comunidades alpinas".
La zona objeto de intervención se ha visto afectada por corrimientos de tierras en el pasado, y aún se observa una serie de inestabilidades profundas que han provocado daños en edificios y, sobre todo, en obras de albañilería y carreteras, en evolución lenta pero continua, con superficies de deslizamiento identificadas mediante seguimiento geotécnico hasta decenas de metros por debajo del nivel del suelo.
El sistema de vigilancia geotécnica de Garzeno y Catasco pertenece al grupo de vigilancia permanente de inestabilidades activo las 24 horas del día con fines de protección civil bajo la gestión del Centro Regional de Vigilancia de Corrimientos e Inestabilidades (CRMFD) de ARPA Lombardia.
A partir de octubre de 2016 se instaló un sistema inicial, reforzado posteriormente en 2017 en el marco del Proyecto ARMOGEO, que constaba de la siguiente instrumentación:
- 23 patrones de referencia topográficos y 1 estación total automática;
- 2 tubos inclinométricos equipados con cable TDR (IN1 e IN2);
- 8 sondas biaxiales automáticas distribuidas en los tubos inclinométricos;
- 1 piezómetro automático;
- 2 estaciones de recogida y transmisión de datos con tecnología GPRS y por satélite;
- 1 cámara orientable instalada en la cubierta de la estación total automática;
- 2 tubos inclinométricos manuales.
La red de observación se completa con una estación meteorológica que forma parte de la red gestionada por ARPA Lombardia y está situada a 581 m de altitud a lo largo de la carretera que va de Garzeno a Catasco. La estación está equipada con un pluviómetro, un termómetro y un medidor de la humedad del aire.
El lugar examinado se ve afectado por inestabilidades lentas del orden de unos pocos centímetros por año, que cambian constante y progresivamente. Con el tiempo, la excesiva deformación del suelo y, por consiguiente, de las tuberías, ya no permitía reposicionar correctamente la instrumentación después de cada mantenimiento, por lo que se interrumpieron las mediciones.
El objetivo de la nueva intervención es restablecer y reforzar la red de vigilancia existente para que las mediciones de los desplazamientos superficiales y profundos a lo largo del tiempo sean más precisas y, así, comprender la evolución de las grandes inestabilidades en curso, permitiendo la evacuación completa de la zona durante una fase de alerta.
Para alcanzar el objetivo mencionado, se han previsto tres intervenciones: las dos primeras consisten en la realización de nuevas perforaciones, la instalación de dos nuevos tubos inclinométricos y sus cadenas en el anejo de Catasco. La tercera y última intervención consiste en la construcción de una nueva estación de vigilancia que también proporcionará información en la zona aguas arriba de Catasco, cerca de la puerta de entrada al campo de deportes de Garzeno, para lo que se realizará un nuevo sondeo vertical mediante perforación continua hasta una profundidad de 100 m, que albergará una nueva cadena inclinométrica automatizada. La perforación estará equipada con tuberías inclinométricas, cable coaxial TDR que automatizará la instrumentación, y 4 sondas inclinométricas biaxiales fijas colocadas a una profundidad de interfaz entre dos estratos geológicos de naturaleza y comportamiento diferentes, con el fin de definir los posibles desplazamientos profundos del terreno en el plano horizontal.
Estos sistemas, de los que se hará cargo el CRMFD, se adaptarán y/o modernizarán más adelante de acuerdo con las normas ARPA.